River Plate se quedó con el primer Superclásico oficial de handball
La pasión del Superclásico argentino trascendió la frontera del fútbol y desembarcó, por primera vez, en el handball. Este viernes, Boca Juniors y River Plate protagonizaron un duelo inédito en la Liga de Honor Oro masculina, la máxima categoría del handball nacional, ante un marco imponente en el Parque Olímpico de Villa Soldati. El «Millonario» se quedó con el triunfo por 27 a 24, en un partido vibrante y repleto de emociones.
El encuentro, correspondiente a la séptima fecha del Torneo Apertura, convocó a más de 2.500 personas que colmaron las tribunas de “La Casa del Handball” con cánticos, banderas y una intensidad pocas veces vista en este deporte. Desde ambos lados bajaron canciones típicas de los clásicos futboleros, incluyendo referencias a la mítica final de Madrid en 2018.
En lo deportivo, el partido estuvo a la altura de la expectativa. Boca comenzó mejor y se fue al descanso con ventaja de 14 a 13. Sin embargo, en la segunda mitad, River ajustó su defensa, encontró efectividad en ataque y dio vuelta el marcador. El gol definitorio llegó a solo cuatro segundos del final, cuando Bautista Gallardo —hijo del histórico entrenador Dady Gallardo— selló el 27-24 definitivo y desató la euforia del público riverplatense.
Con este resultado, River no solo se quedó con el primer Superclásico oficial de handball, sino que también escaló en la tabla de posiciones y se posiciona como uno de los candidatos en el certamen. Para Boca, el sabor amargo de la derrota se combina con el orgullo de haber sido parte de un acontecimiento histórico para el handball argentino.
«Sabíamos que este partido iba a marcar un antes y un después. Lo vivimos como una final y lo ganamos con el corazón», declaró Gallardo tras el encuentro.
Este Superclásico no solo fue un partido. Fue una señal clara del crecimiento del handball en Argentina, que se fortalece con la incorporación de clubes de gran peso institucional como Boca y River. Lo que comenzó como un evento singular, promete transformarse en una nueva rivalidad clásica del deporte nacional.
